Un baño lustral es un baño ritual que se lleva a cabo con algunas de las plantas o flores asociadas con los espíritus y deidades protectoras (orishas).
Una de las maneras de realizar el baño lustral es la siguiente: se colocan las plantas en una bolsita de tela y se introduce la bolsa en la bañera con agua bastante caliente.
La persona entra en el baño y pone varias velas blancas, en el número perteneciente a la deidad. Luego enciende un poco de incienso, se relaja y comienza a invocar mentalmente y a pedir que a través de la deidad protectora, el baño limpie y purifique sus energías. Hay que visualizar que la luz de las velas llena la bañera de luz y que esa luz, junto con el poder de las plantas, penetra por la piel.
Se debe permanecer en el baño durante una medía hora y luego vaciar el agua, visualizando que con el agua se van por el desagüe todos los problemas y dificultades que se padecen.
Al salir del baño, se le da las gracias a la deidad y se le enciende una vela de su color.