Yemaya, tu que gobiernas las aguas derramando sobre la humanidad tu protección, realizando, oh! Divina Madre, una descarga en sus cuerpos y sus mentes, limpiando las aguas e infundiendo en sus corazones el respeto y la veneración debida a esa fuerza de la naturaleza que simbolizas, permite que vuestras falanges nos protejan y amparen.
Te hacemos esta súplica, Yemaya, poderosísima, reina de las aguas, (hacer petición). Con todo amor y justicia dadme la fuerza necesaria para soportarlo todo. En un mar de naturaleza y armonía quiero vivir. Proteged a mis seres queridos de todos los males y peligros. Salve, Yemaya, reina del mar.